martes, 10 de octubre de 2023

sábado, 8 de abril de 2023

CENTRALIDAD O EL VACÍO COMO OPORTUNIDAD / EL CENTRO DE SAN JUSTO

 

    Ilustracion del autor / sobre vieja foto del centro de San Justo_La Matanza_Buenos Aires

(El siguiente es un aporte al curso de Proyecto Urbano del año 2023, en la cátedra del Dr.Arq. Javier Fernandez Castro.)


INTRO.

Asistimos hoy a la disolución de toda asociación intelectual posible respecto de las centralidades urbanas de la Región Metropolitana de Buenos Aires que no sean las que gravitan la idea clásica de centro y periferia. La época de las conceptualizaciones policéntricas, arborescentes y rizomáticas cede a la difusión de centros y subcentros, en los paisajes infraestructurales relativamente fallidos, o escasos, y las espacialidades vaciadas de contenido[1]. Sin embargo, dicha cualidad de lo vaciado, dicha aparente carencia de sentido de los centros metropolitanos es, sostenemos, la ocasión para el proyecto de una alternativa al centro histórico de la ciudad, único que, a través de la coerción gravitatoria del poder real, aproxima a las sustancias y los sujetos hacia la ficción del único centro posible.

El Centro Histórico de la Ciudad de Buenos Aires logro mantener su condición simbólica de ser capital, de ser el punto de lectura supuestamente fundamental para la interpretación del fenómeno metropolitano de la ciudad toda. Dicho registro imaginario no es casual dado que refiere a una construcción de sentido político avalada por todos los medios posibles; medios que responden a una estrategia de hegemonía político-económica que no se condice, necesariamente, con las verdaderas condiciones de producción y de las potencialidades de, “los otros centros urbanos” de la ciudad.

No se trata de presentar la siempre torpe antinomia al centro capitalino. Está probado por la historia misma, que dicho ensañamiento es inconducente. Se trata, en todo caso, de insistir, en contradicción con lo dicho más arriba, con una conceptualización, pero construida desde los fundamentos tácticos, materiales, paisajísticos y sociales que conforman a los diversos centros de la RMBA, con el objeto de favorecer lecturas y registros del territorio que sean, en sí mismas, potenciales proyectos innovadores, nuevas propuestas que atiendan también a las condiciones históricas de los recursos productivos, sociales y espaciales que caracterizan, y cualifican, a cada territorio urbano específico de la región.

Para transitar este camino del proyecto, será necesario atravesar a las diversas modalidades y espacialidades de exclusión actuales, posiblemente también a sus respectivas materialidades e inmaterialidades, que se manifiestan como deslindes contrarios a los entramados colectivos de las prácticas sociales urbanas. Nos referimos, por ejemplo, a las espacialidades de los enclaves urbanos excluyentes de la RMBA, como los comúnmente llamados barrios cerrados, y a sus variantes comerciales e industriales. En este sentido, la idea de inclusión, posiblemente trillada, deberá ser actualizada y repropuesta. No es posible una RMBA próspera sin una verdadera atención a la inclusión, con justicia socioespacial, de todas y todos sus habitantes, en lugares abiertos a un desarrollo urbano integral que torne a los ámbitos vaciados de contenido, en ámbitos para un poder popular transformador.

 

POR QUÉ UN CENTRO URBANO.

 

Es peculiar de este tiempo histórico, uno posterior a la pandemia de covid, de la expansión de las infraestructuras cibernéticas de alcance global, de la autogeneración de las inteligencias artificiales, el poner en duda el valor de los centros urbanos. Abundan propuestas, planes y proyectos de organizaciones de habitación, dispersas, rururbanas y de autoexclusión, ya que las infraestructuras informacionales posibilitan una conexión tecno-metafísica relativa ¿quién necesita un apersonarse en una oficina para trabajar cotidianamente? ¿Quién necesita presentarse en una fábrica de un barrio industrial del centro, para trabajar, cuando dichas fábricas están progresivamente automatizadas y controladas a distancia? Lo mismo puede preguntarse de las estancias para la educación, la cultura, la recreación, la salud, etc.

 

Este, sin embargo, no es un debate nuevo. A Le Corbusier le solicitan, en su estadía de 1930 en la URSS, un informe sobre las propuestas del programa para una Ciudad Verde en las afueras de Moscú, lo cual rechaza dada su amistad con varios de los urbanistas soviéticos que, para dicho programa, defienden el proyecto de una desurbanización progresiva de los centros en pos de llevar la industria al campo. Se limita, entonces, a escribir una carta a su amigo Mosei Ghinzbourg, donde le plantea la defensa del fenómeno de la aglomeración urbana contemporánea, frente a la idea de su difusión o desintegración. Así respecto del concepto de “desurbanización” plantea que:

“En este término hay la contradicción misma; esta palabra es un contrasentido fundamental, que ha engañado a muchos ideólogos occidentales; que ha hecho perder el tiempo a los consejos de administración de nuestras industrias -un contrasentido fundamental, al que que todo combate e invalida. El fenómeno social es complejo; no es simplista. Quien busca darle una solución precipitada y tendenciosa, encuentra a quien hablar: se venga, cae en estado de crisis; y, a pesar de los avatares o de las represiones, no se deja vencer: ¡la vida pasa por encima!”[2].

Más contradictorio aún es el planteo de un urbanismo de la desurbanización. Es, claro, bastante fácil el escapismo, en especial para aquellos que pudieron servirse de los beneficios de la urbanidad, y que luego proponen, al pueblo, el retorno a un supuesto pasado campestre ideal. Es cierto que las ciudades y sus centros caen, por intervalos, en desgracias históricas, pero en el balance siempre fueron las ciudades los lugares desde donde, colectivamente, se favorecieron nuevas derivas para las civilizaciones. Lejos también, de la controversia entre civilización y barbarie, el debate debería pasar hoy por las estrategias posibles para hacer de las ciudades, verdaderos ámbitos de inclusión y cuidado, del Ambiente y de todas las poblaciones. En este sentido, continúa Le corbusier:

“El hombre siente la necesidad de agruparse -siempre, y en todos los países y bajo todos los climas-. La agrupación le da la seguridad de la defensa, el placer de la compañía. Pero, así que los climas se vuelven rudos, la agrupación provoca la actividad industrial, la producción, por medio de la cual los hombres viven (se visten, se proporcionan unas comodidades). Y la producción intelectual es la hija del trabajo de hombres reunidos. La inteligencia se desarrolla, se agudiza, multiplica su juego, adquiere las finezas y sus innumerables facetas, en las masas agrupadas. Es el fruto mismo de la concentración. La dispersión atemoriza, empobrece y suelta todos los lazos de la disciplina material y espiritual, sin la cual el hombre retorna al estado primitivo.” [3]

Esto no quiere decir que Le Corbusier haya sido contrario a la idea de una Ciudad Verde, solo que concebía la idea de una metrópolis verde y densa, económicamente sustentable. Así es que dice:

“Mi querido Ghinzbourg, la arquitectura moderna tiene, precisamente, por misión magnífica organizar la vida de las colectividades. He sido el primero en proclamar que la ciudad moderna ha de ser un parque inmenso, una ciudad verde. Pero, para poder permitirme este lujo aparente, he cuadruplicado la densidad de la población y, en lugar de extenderlas, he acortado las distancias.”[4]

Es cierto que, luego de estas afirmaciones, pasaron muchas cosas y acontecimientos, guerras, catástrofes de distinto tipo, cambios sociales, técnicos y culturales, pero, las ciudades, luego de estos acontecimientos, se volvieron a proyectar y reconstruir. Las historias de las ciudades son siempre trágicas y terribles, pero, las historias de las ciudades son también, pues, la historia misma, sinfonías agridulces. Hoy las ciudades necesitan, justamente, de todos sus estratos epocales. Las ciudades no son, como pensaba Corbusier, potenciales sitios a ser derruidos para, luego, erigir La Ciudad Moderna, sino entramados de tiempos diversos que aportan las experiencias y saberes en los momentos oportunos.

A la vista de las diversas orientaciones de los problemas que aquejan a la humanidad actualmente, como las catástrofes sociales y ambientales, la progresiva escasez de combustibles y materias no renovables parece conveniente la reprogramación de las urbes y sus centralidades, antes que su desmantelamiento. Cada gran distrito, requiere de su centro referencial, su órgano espacial y arquitectónico fundante, que posibilite la articulación de todo el organismo urbano, con sus diversas densidades y paisajes, con sus diversos programas y poblaciones, todos reunidos con el objeto de construir un sentido urbano de la existencia.

 

EL CENTRO DE SAN JUSTO COMO HÁBITA INTEGRAL.

El Partido de La Matanza se caracteriza, entre múltiples atributos, por ser un gran territorio que atraviesa los tres cordones metropolitanos que conforman a la Región Metropolitana de Buenos Aires. En este sentido, La Matanza posee una identidad compleja de paisajes que van de los entramados urbanos densos, con mixturas de programas habitativos, productivos, comerciales y recreativos de todo tipo y escala, a los ámbitos que se encuentran en situaciones de transición hacia conformaciones rururbanas, o los caracterizados por la carencia material, la emergencia social y la ambiental. Igualmente, es posible localizar lugares que, si bien se corresponden con espacialidades determinadas y estructuradas requieren, debido a cambios históricos y de contexto que dejan obsoletos a sus programas originarios, de proyectos urbanos y arquitectónicos de carácter integral con el objeto de suscitar las condiciones para, no solo rehabilitar las intensidades en los usos, sino favorecer un hábitat de nuevo tipo, un hábitat Integral , tal es el caso de Centro de San Justo en el Partido de La Matanza.

Por añadidura, el planteo sobre la oportunidad de un hábitat Integral nos deja ante la primera pregunta ¿Que es hábitat? o ¿Que es un hábitat? establecer una genealogía conceptual del mismo parece intuitivamente simple, pero no lo es tanto dado que el acento antropológico y filosófico se centra más en la noción de Habitar y no tanto en el hábitat. Si, es cierto, tenemos a pensadores de la talla de Martin Heidegger que escribe sobre un Construir, Habitar, Pensar, pero no precisa por escrito al hábitat como concepto. Aparentemente, Heidegger está todo el tiempo hablando del hábitat, pero al no nombrarlo, el que sea parte de la teoría heideggeriana es más una interpretación o deseo de quien, desesperadamente, busque una referencia teórica.

Volvamos a la pregunta y ensayemos una posible respuesta, el hábitat es el resultado de las prácticas del habitar. Disculpen, entonces, si retorno a Heidegger dado que es quien también dice que, quien habita, habita porque construye. El proponer a este pensador, y no a otro, es para nosotros estratégico. Si el habitar es también construyendo, entonces el hábitat como resultado del habitar, no es cualquier ámbito, cualquier entorno, sino el propiamente construido por los habitantes, estos son, los seres humanos. Aún nos queda el Pensar, del Construir, Habitar, Pensar de Heidegger. Si pensar, es ese componente que se integra con el construir y el habitar, entonces debe ser también un aporte a la existencia de estos. El pensar es aquello que integra al construir con el habitar.

Ahora ¿cómo pasamos del pensar al construir para habitar? No se trata de cualquier pensar, es un pensar que se pone por delante, necesariamente, del construir. El construir, y no solo lo construido, es proyectado, entonces, hacia el momento propicio para poder habitar. Así, proponer un hábitat que integra construir, habitar y pensar, según todas las prácticas sociales que lo favorecen, específicamente, las propias de todo gran centro urbano, requiere del proyecto como un pensar complejo que prefigura al hábitat. Esto es así, especialmente en los casos, como el Centro de San Justo, que compatibilizan prácticas distintas, gubernamentales, productivas, comerciales, educativas, recreativas, etc. El Centro de San Justo, en cuanto hábitat Integral es objeto del proyecto, en este caso, urbano y arquitectónico.

Desde el proyecto del Centro de San Justo como hábitat Integral de diversas prácticas sociales entramadas, se espera, además, que irradie la urbanidad que el partido de La Matanza requiere como referencialidad simbólica y real. Las ideas de difusión del centro no parecen convenientes a un contexto donde conviven instancias de desarrollo con territorialidades y poblaciones con diversos niveles de carencia. En este sentido, el centro urbano, antes que ámbito de exclusividad, debe transformarse en ámbito de cuidado e inclusión, de crianza de todas y todos. Debe nutrir a un pueblo en sus múltiples derechos, con cierta administración de los poderes y las espacialidades, esto es, con una relativa economía que torne sustentable a un territorio de la magnitud del centro de San Justo.

Si de economía hablamos, por otro lado, es necesario, además, situar al momento histórico en las economías infraestructurales y cibernéticas de la transformación digital, aunque estas no tienen sentido sin la implementación de las concreciones infraestructurales y arquitectónicas fundantes. Es decir, para tener una economía contemporánea pujante, se requiere de un centro urbano arquitectónico e infraestructuralmente constituido a través de los proyectos correspondientes. Se requieren de nuevas espacialidades en gran medida inéditas, es decir, se requiere de nuevas experiencias, o experimentos urbano-arquitectónicos, dado que no existen dispositivos catalogados para esta situación sino, en todo caso, de genealogías y referencias posibles, que deberán ser adecuadas al contexto específico del caso del Centro de San Justo.

 

FUNDAMENTO PARA UNA EXPERIMENTACIÓN PROYECTUAL SOBRE EL CENTRO DE SAN JUSTO.

El concepto de experimentación es un tanto complejo porque indica la actividad de probar, o ensayar con cierto riesgo, las condiciones de una exterioridad, y aquí va lo complicado, desde el mismo interior de dicha interioridad. Eso es verdaderamente una contradicción ¿cómo podemos ensayar las condiciones de un fenómeno externo, desde su mismo interior? ¿Cómo puede ser externo e interno al mismo tiempo? La respuesta es efectivamente difícil para las ciencias duras, pero quizás no tanto para las disciplinas del proyecto urbano y arquitectónico, ya que esa exterioridad que es nuestro objeto de estudio, es el mismo hábitat que nos rodea. El hábitat es, igualmente, ese ámbito, es decir ese contorno multidimensional y multiescalar que nos rodea. En principio está fuera del ser humano, pero el ser humano se encuentra dentro del hábitat.

Que el ser humano vivencia al hábitat desde su interior es casi una obviedad. Ahondemos, entonces, la idea y digamos también que el hábitat vive en el interior de nosotros, los seres humanos. Sería, de esta manera, una auténtica relación con un máximo de reciprocidad. justamente esta es la cuestión con el hábitat Integral y su proyecto. Solo si entendemos que los seres humanos somos con el hábitat y el hábitat con nosotros, podremos emprender las experimentaciones proyectuales imprescindibles que el tiempo histórico, amplio en retos, nos demanda, aunque, es necesario también advertir lo siguiente, que el hábitat integral refiera, dado sus significantes, a una idea de globalidad, no quiere decir que estrictamente posible el captar su totalidad. No es así porque dicha integralidad excede la capacidad de la experiencia humana más o menos directa.

La experiencia del Hábitat Integral entonces será, inevitablemente, dado lo expuesto, una experimentación proyectual insuficiente en términos de su alcance territorial ¿hasta dónde llega, por ejemplo, el Centro de San Justo? sus redes arriban y se dirigen a los confines del mundo a través de las infraestructuras de la información. Por eso, dicha insuficiencia debe ser lo más potente en términos de propuesta. Esa potencia será evaluada en función de su capacidad de generar imaginarios. Un Imaginario no es una fantasía, es una direccionalidad, un lineamiento, la orden para una organización conceptual y técnica que afecta a una determinada realidad. Una experimentación proyectual sobre el centro de San Justo, por lo tanto, no puede ser la mera renovación de lo existente, un lavado de cara, debe ser la transformación del contexto dado en función de un futuro.

El valor cualitativo de un futuro, sin embargo, se mide con relación a la evaluación concienzuda del presente, a la lectura del contexto vigente respecto de los atributos de este que se hayan utilizado como referencia. Una experimentación proyectual sobre el centro de San Justo será, por ende y como consecuencia de lo dicho en los párrafos anteriores, parcial, aunque, si se emprende como una experimentación colectiva y abarcativa, más rica y eficaz. Solo una experimentación proyectual colectiva puede generar el grado de intensidad suficiente como para comprender el objeto de estudio complejo que esta jurisdicción representa, en vistas de su complejidad.

 

Dr. Arq. Leandro Tomás Costa

Abril 2023

 

 Bibliografía:

< Elinbaum, P.; Vecslir, L. (2016). Centros y centralidades en la Región Metropolitana de Buenos Aires. Artículo en: Del conocimiento al desarrollo. Nuevos desafíos de la universidad en la gestión del desarrollo urbano contemporáneo. Buenos Aires: Eudeba.

< Fernández Castro, J. (2021). Tesis Doctoral:  Ciudad, Proyecto, Pueblo: Estrategias urbanas para el hábitat popular: lecturas, propuestas y gestiones desde la investigación proyectual. Buenos Aires: Repositorio de Tesis doctorales de la FADU/UBA. http://repositoriouba.sisbi.uba.ar/gsdl/cgi-bin/library.cgi?a=d&c=aaqtesis&cl=CL1&d=HWA_5427

< Heidegger, M. (2002). Construir, Habitar, Pensar. Buenos Aires: Alción.

< Le Corbusier (1999). Precisiones. Respecto a un estado actual de la arquitectura y el urbanismo. Barcelona: Editorial Apóstrofe (colección Poseidón).



[1] En gran medida, este texto es resultado de la idea vertida en una reunión de trabajo académico, por mi compañero y adjunto de la cátedra, el Arq. Matías Tozzini quien dijo, respecto de la situación de los centros y subcentro metropolitanos, que los mismos quedaron vaciados de contenido, debido a múltiples factores.

[2] Le Corbusier (1999). Precisiones. Respecto a un estado actual de la arquitectura y el urbanismo. Barcelona: Editorial Apóstrofe (colección Poseidón). Página 291.

[3] Idem. Página 291.

[4] Idem. Página 292


EN PULSIÓN. Arqui-tectónica para una nueva asamblea en la era de la Post_Pandemia Bélica

 

          Ilustracion del autor

(El siguiente texto lo realicé como aporte al curso 2022 de la materia Electiva Investigación Investigación Proyectual y como vision sobre el tema de la relación entre las Pulsiones y el Zeitgeist, en el Proyecto Urbano y Arquitectónico actual, tema sugerido y trabajado arduamente por mi amigo y titular de la materia electiva, el Dr. Arq. Federico Eliashev.)


Was ihr den Geist der Zeiten heisst,
Das ist im Grund der Herren eigner Geist,
In dem die Zeiten sich bespiegeln.


(Lo que llamas el espíritu de los tiempos
es, en el fondo, el espíritu de las gentes
en quienes los tiempos se reflejan.)

 Fausto. Johann Wolfgang von Goethe

 Partamos de lo siguiente, no existe, en el espacio tiempo, algo así como una superación de las huellas que nos marcan. No existe una cierta instancia Post, luego de catástrofes como las pandemias, las guerras y las grandes crisis económicas, por cuanto siempre quedan remanentes fenomenológico-arquitectónicos de las pulsiones, más o menos metafísicas, más o menos concretas, más o menos humanas, que transforman al mundo definitivamente.

Las antinomias entre los impulsos a la muerte y la vida devienen cuerpos presentes y ausentes, cancelaciones y suplementos. Diferencias inabarcables. Escrituras imposibles que desbordan toda pretensión de gobierno y toda autoridad. Solo una verdadera asamblea, en tanto reunión de los colectivos más diversos, podría, en este contexto planetario, en un zeitgeit[1] aparentemente totalizador, aunque indómito, como el actual, establecer una arquitectura como intervalos libres desde donde pensar y responder a las diferencias y oposiciones del mundo, tornándolas proyecto, al tiempo de sostener heterogeneidades.

Esto puede parecer relativamente simple si no fuese que dicha asamblea requiere, a su vez, de una nueva arqui-tectónica, es decir un refundar el origen de lo técnico que nos incumbe en tanto disciplina, como condición de posibilidad, aunque sin principio y sin final. Un espaciamiento materializado, concreto. Una dimensión para la perspectiva crítica del zeitgeist, para poder leerlo y, entonces, re-escribirlo por partes. ¿A partir de qué instante pensar e informar sobre dicha arquitectura? ¿Cómo debería ser esta arquitectura antes de la arquitectura? ¿A dónde se dispondría? ¿A dónde nos llevaría? Se trataría, posible y probablemente, de un nuevo distanciamiento EN las mareas de un mundo comprimido por sus pulsiones.

Proposición_Investigación Proyectual

Estamos, convengamos, bajo el dominio del mundo, no dominándolo, eso es lo que tenemos que entender. El mundo es aquello que, tanto se nos revela, como se revela, es decir que nuestra relación con el mismo es del tipo de la inmersión en materias e inscripciones que suscitan nuestras pulsiones. El mundo y su historia es el material a partir del cual deseamos afirmar, destruir o transformar. Esa materia inabarcable, que muchas veces se nos hace escasa y otras abrumadora, se descompone en elementos que se representan y producen, a través de nosotros, los seres humanos, en poéticas y técnicas, también en ciencias; en arquitecturas.

La arquitectura, podemos convenir igualmente, no es resultado, solamente, del llamado buen arte de proyectar y construir, si por este entendemos el orden que se relaciona con el uso según la norma y con la atención a la mera eficiencia de los procedimientos técnicos. La arquitectura es también la inscripción concerniente a una interpretación según el recorte problemático del zeitgest. Es lectura, recorte y reinscripción del mundo. Es revelarse al mundo, denunciarlo, reelaborar sus condiciones, determinaciones e indeterminaciones.

El objetivo de la Investigación, entonces, es el de problematizar e inventar, ficcionar, las instancias del proyecto para reimprimir en el mundo, nuevas informaciones manteniendo las precedentes, como un palimpsesto que sobrevive a múltiples capas de lectura y grabados. En este sentido una Investigación Proyectual es, siempre, la historia de las investigaciones proyectuales que han sido; es decir, de los proyectos, en nuestro caso, de la arquitectura, que aportaron pensamientos, textos y edificaciones a eso que llamamos mundo, a partir de los problemas de este. Dicha historia es nuestra condición espacial y temporal de posibilidad disciplinar, nuestro necesario distanciamiento original para poder, paradójicamente, sumergirnos y transformar al orbe, al tiempo de ser transformados por este. 

Metodología_momentos

Para una Investigación Proyectual inicial.

1ra Etapa_Lectura_inmersión / duración aproximada: tres a cuatro clases.

Pretender leer al mundo puede sonar ridículo, y lo es, solo recibimos informaciones fragmentarias y dirigidas, mayoritariamente tremendas. Son recortes; pues bien, en ellos habitamos, son nuestro material referencial. ¿Cuáles son las pulsiones que declaran y enmascaran? ¿Cómo afectan al hábitat? ¿Cómo afectan a la arquitectura y a sus pobladores? ¿Cómo reensamblar lo nunca ensamblado? Lo no reunido, sin embargo, requirió en la historia, de esos cortos momentos de confraternidad y apego. Experimentos, distancias para un acercamiento paradójico.

Mediante la recopilación de imágenes antecedentes y posteriores figuraciones preliminares, como huellas presentes y futuras, de situaciones del hábitat y sus residentes, más o menos nativos o exóticos, víctimas o victimarios, cada investigador (estudiante) nos sumergirá en la corriente inicial de una investigación proyectual. El tema específico, el recorte a ser distanciado para su análisis, lo mismo que los objetivos particulares de la investigación, serán definidos luego,…en equipo, con los y las docentes; con las compañeras y los compañeros estudiantes, aunque podemos adelantar algunos temas estratégicos:

Contextos genéricos posibles:

1-     Guerra generalizada (convencional, económica, híbrida,etc).

2-     Nuevo Régimen Climático, catastrófico.

3-     Pandemias simultáneas.

Problemáticas asociadas:

1-     Movimientos masivos de población.

2-     Auto reclusiones colectivas de emergencia.

3-     Des-infraestructuralización (físicas y/o metafísicas) urbana emergente.

Experimentaciones Arquitectónicas:

1-     Arquitecturas instantáneas de refugio - Tectónicas Livianas

2-     Arquitecturas subterráneas - Tectónicas Térreas

3-     Islas de arquitecturas infraestructurales autoabastecidas - Tectónicas Híbridas

Otros temas complementarios o suplementarios posibles: Ecologías híbridas; ecologías oscuras; hábitats infraestructurales habitables; organizaciones cibernéticas y post-cibernéticas; entornos refugio; espacialidades públicas como intervalos libres de dominación, arquitecturas de la era postpandemica-bélica, viviendas de supervivencia e hipervivencias, etc.

Producción para esta 1er etapa: Una pre-estratégia.

-        Primer estadio de lectura según fines internos y externos.

-        Consideraciones generales sobre el entorno:

. Ámbito general: Genérico. Clima Meridional.

. Ámbitos específicos: Ciudad de Buenos Aires. Sectores des-industrializados; sectores con múltiples capas de entramados habitacionales, espacialidades de las vacancias ecológicamente híbridas.

 

OBJETIVO: Realizar una propuesta de arquitectura en el sentido de la preservación y cultivo de toda vida humana (individual y colectiva) y de las especies del planeta.

 

2da Etapa_Recorte_problematización_experimentación / duración aproximada: tres a cuatro clases.

Leer es representarse un cosmos, representar es proyectar el suplemento de un mundo real in-representable, aunque dicho suplemento experimental es lo más cercano que podremos estar de los fenómenos pulsionales habitacionales en estudio.  Mediante el cruce entre referencias genealógicas externas (fines externos según la lectura previa) e internas (fines internos según ejemplos de arquitectura precedentes) a la disciplina se dará inicio a una segunda etapa del curso donde se experimentará, a su vez, las condiciones para una arquitectura relativa a la problematización inaugural.

Producción para esta 2da etapa: Tácticas arqui-tectónicas

-        Se introducirán referencias arquitectónicas conscientes, propuestas por el equipo docente. Dichas referencias serán los elementos iniciales para una experimentación proyectual de tipo genealógica.

-        Se precisará una operación de transformación material.

-        Según lo informado en el punto anterior se procederá a realizar operaciones de alteración sobre morfologías y tectónicas. Las complexiones serán de grado suficiente como para detectar cambios sustanciales en las organizaciones arquitectónicas propuestas.

-        Se analizará lo realizado en términos de caracteres determinados, determinables, indeterminados e indeterminables, con el objeto de establecer un posible programa complejo de proyecto (consideración operativa con relación a la triada: Utilitas, Firmitas y Venustas). 

3ra Etapa- Re-inscripción / duración aproximada: tres a cuatro clases.

No debemos tomar a la palabra escritura en el sentido vulgar. Escribir no es, solamente, describir al tejido de conceptos mediante sus signos escritos convencionales, es, en el marco de una investigación proyectual en arquitectura, la cimentación para la posterior edificación de una lógica más acá y más allá del discurso. La escritura resultante será, entonces el primer ensamble; un ensamble de prefiguraciones arquitectónicas avanzadas que respondan en calidad de invenciones provenientes del interior mismo, del dominio mismo de las problematizaciones enunciadas en las primeras instancias.

Producción para esta 3ra etapa: Estrategias de proyecto urbano-arquitectónico para el contexto propuesto.

-        Ensamble proyectual final, recontextualización según imágenes diversas convenidas entre cada estudiante y los docentes. Transformación del zeitgeist local-mundial.

-        Enunciado post-fáctico como conclusión.



[1] Conjunto general de ideas, creencias, sentimientos, etc. que caracterizan a un período particular de la historia. Fuente: Diccionario Cambridge.

 Bibliografía:

< Ábalos, I. (2000). La Buena Vida. Barcelona: Gustavo Gilli.

< Ábalos, I. (2009). Naturaleza y artificio. Barcelona: Gustavo Gilli.

< Borja, J. y Castells, M. (1997). Local y global – La gestión de las ciudades en la era de la información. Madrid: Grupo Santillana.

< Deleuze, G. y Guattari, F. (2002). Mil Mesetas – Capitalismo y la esquizofrenia. Valencia: Pre-Textos.

< Derrida, J. (1998). De la Gramatología. México: Siglo Veintiuno Editores.

< Eliaschev, F. (2018). Dispositivos Proyectuales Sensibles. Buenos Aires: Editorial CONCETRA.

< Latour, B. (2008). Reensamblar lo Social: Una introducción a la teoría del actor-red. Buenos Aires: Editorial Manantial.

< Latour, B. (2017). Cara a cara con el Planeta. Buenos Aires: Siglo XXI.

< Morton, T. (2018). Hiperobjetos. Filosofía y ecología después del fin del mundo. Buenos Aires: Adriana Hidalgo editora.

< Morton, T. (2019). Ecología Oscura. Sobre la coexistencia futura. Madrid: Paidós.

< Virilio, P. (2006). Ciudad Pánico. Buenos Aires: Libros del Zorzal.

< Sarquis, J. (2003). Itinerarios del Proyecto, tomos I y II.  Buenos Aires: Nobuko.

< Sarquis, J. (2005). Arquitectura y modos de habitar. En la revista de la Sociedad Central de Arquitectos nº 217. Buenos Aires: Ediciones de la Sociedad Central de Arquitectos.

< Sloterdijk, P. (2009). Esferas III. Espumas: Esferología Plural. Madrid: Siruela.

< Sarquis, J. (2005). La investigación proyectual, precisiones. Recuperado el 1 de agosto de 2013, de: http://www.arqepisteme.iteso.mx/CQV1JorgeSarquis1.htm.


Autor: Dr. Mg. Arq. Leandro Tomás Costa / Marzo 2022

viernes, 7 de abril de 2023

APARTAMENTO Y MUNDO. Momentos liminares_Ficciones gráficas de una Investigación Proyectual

 



Intro.

Cuando desde el umbral de nuestro hogar observamos la calle exterior, o miramos hacia un pasaje interno en un edificio de apartamentos, transgredimos límites y bordes, acortamos distancias respecto del mundo, aunque, al momento de abrirnos camino y emprender la marcha, alargamos distancias relativas a nuestro ámbito exclusivo, siendo que el mismo es, claro está, parte de un mundo o unos mundos; parte de un ordenamiento u ordenamientos que nos exceden y, probablemente, exceden nuestra capacidad de comprensión, por más inteligente que uno sea.

Un apartamento parece ser, con relación al mundo, un arquetipo modular del mismo, generalmente urbano, siendo que la sumatoria de los distintos ejemplares de apartamentos constituyen una enciclopedia de los modelos sociales, económicos, políticos, del proyecto arquitectónico y, por forzarlo un poco, metropolitano. En este sentido, un apartamento es condición de posibilidad para el conocimiento sobre el mundo como hábitat, es una proclama filosófico-política sobre las prácticas sociales que, no solo lo inscriben, sino que lo disponen como contexto y zeitgeist.

Desde el apartamento; desde la parte del mundo para tomar distancia, el habitante establece un tipo de contacto paradójico con el mundo, lo puede pensar, puede establecer posibles estrategias y tácticas para su despliegue en el mismo, al igual que con los colectivos humanos y no humanos que también forman parte de este. Un apartamento es, de manera supuestamente contradictoria, el punto de ligazón con el mundo, o debería serlo. No hay posible hábitat colectivo honesto y vital sin el ámbito para, según instancias diversas, apartarse.

Las revoluciones entre el apartarse y el acercarse, entre individuo y colectivo, no son ni serán, por lo tanto, motores del aislamiento, sino edificaciones colaborativas y asociativas; edificaciones que tendrán por misión inicial el proyecto del problema en relación a los programas de usos posibles para una arquitectura de naturaleza colectiva, con las instancias de apartamento necesarias; una arquitectura que observe y proponga, también, los programas estructurales, tectónicos y tecnológicos, y a los determinados por las propiedades expresivas y estéticas; programas sin los cuales dichas edificaciones y sus entornos interiores y exteriores, estarían carentes de sentido.

Es por esta razón que proponemos, para este primer curso de la Maestría de Investigación Proyectual, el indagar experimentalmente, y el proponer, las condiciones de proyecto para el apartamento y, claro, su fenómeno colectivo, en el contexto histórico que nos toca, con sus contingencias y tribulaciones, con sus potencialidades y poderes que lo traspasan porque, precisamente, de traspasar los apartamentos y sus umbrales se trata, en gran medida, la Investigación Proyectual.

 



EL CURSO DEL TALLER 1_PROPUESTA METODOLÓGICA BÁSICA:

 En este primer curso de taller proyectual de la Maestría de Investigación Proyectual proponemos, a los investigadores proyectuales en formación, el trabajo intensivo sobre lo que llamamos una prefiguración de un Programa Complejo, siendo que el mismo comprende y está formado, a su vez, distintos tipos de programas y finalidades. Definimos, entonces, estos conceptos básicos a partir de los cuales comenzar este camino de la IP:

 

. Programa Complejo:

“Preparación de los Programas Complejos. según ciertos criterios y precisiones a partir de las significaciones sociales imaginarias que poseen los destinatarios y además la de los actuales arquitectos proyectistas. A diferencia del habitual Programa de Necesidades, que nos habla sólo de las “funciones o actividades” a desarrollar, auspiciamos los Programas Complejos que atienden y derivan de las SI. Éstos son documentos más completos y referidos no sólo a los aspectos utilitarios y sociales; sino además a los técnicos y constructivos y los formales espaciales significativos necesarios para comenzar el procedimiento proyectual. Estos son los aspectos vitruvianos que ese expresan mediante los Programas Complejos y de lo cual podemos decir que: utilitas: En las formas de vida y habitar, es mucho lo que hemos avanzado. firmitas: En las técnicas constructivas, se carece de una clara posición sobre el tema. venustas: En las formas espaciales significativas, tenemos ejemplos esclarecedores.” Pág. 39. Itinerarios de Proyecto II. Dr. Arq. Jorge Sarquis.

. Fines o finalidades:

“Entendemos que hay dos clases de fines, en la arquitectura y en otras disciplinas no sólo artísticas. Aquellos que provienen de la sociedad, y que corresponden al pedido que el destinatario –usuario o comitente individual o colectivo– le solicita al arquitecto. A esto le llamaremos fines externos. Sabemos que el proceso visible o manifiesto se inicia con un cliente o comitente (luego usuario, usuario apropiado, receptor, etc.) quien con su pedido (o finalidad externa por ser ajeno a la disciplina) de una vivienda, un barrio, una escuela, un hospital, etc. arranca el proceso general. El proyectista como mediador en la búsqueda de una forma espacial y un sentido, y mediante una tectónica, transforma estos fines externos en internos, operando (desde la propia lógica de su deseo) con dos racionalidades diferentes: las leyes de las formas tectónicas y su historia con las lógicas humanas y sociales. Estos fines internos son propios de la disciplina y tienen tanta importancia como los externos. Si careciéramos de ellos no habría arquitectura, tal vez sólo tendríamos edilicia o construcción, y si sólo atendiéramos a los requerimientos sociales, tampoco tendríamos arquitectura, tal vez sólo ingeniería social.” Pág. 19. Itinerarios de Proyecto I. Dr. Arq. Jorge Sarquis.

 

Subtipos de las finalidades en el proyecto:

Finalidad Externa:

Macro: Pregunta por el sentido

Micro: Programa Complejo. Significaciones Imaginarias.

Finalidad Interna:

Macro: Zeitgeist (tema en disputa). Materiales históricos.

Micro: Principios constructivos del zeigeist aquel y temas de autor.


SECUENCIA METODOLÓGICA:

 1.-Introducción General: La Investigación Proyectual en Arquitectura. La Vivienda Contemporánea.

 Sentido: Presentación general del tema fundamental de la Maestría, es decir la Investigación Proyectual, y su relación con la historia contemporánea de la Vivienda Moderna como campo de experimentación arquitectónico-cultural.

Operatividad: Clases teóricas

Desarrollo: Se solicita a cada investigador proyectual en formación, la lectura para la próxima clase del Capítulo II “De los fines de la arquitectura. Su constitución histórica. de los fines y de las lógicas”, del libro: Itinerarios del Proyecto. Ficciones Epistemológicas. Dr.Arq. Jorge Sarquis.

 

2.-Ficciones gráficas de una Investigación Proyectual

 Sentido: primer práctico de acercamiento metodológico al tema y a la posibilidad enunciativa de la Investigación Proyectual. Realización de unas prefiguraciones estético-propositivas según el proyecto de una problematización inicial.

Operatividad: Clases teórico-prácticas.

Desarrollo: Selección de categorías y estrategia de análisis:


    a)  por Arquitecto-Autor y sus obras.

b)  por relación de programas.

c)  ejes temáticos en obras disímiles.

 

A continuación, cada investigador proyectual en formación deberá realizar por lo menos tres imágenes de prefiguración de los programas de usos y sus manifestaciones morfológicas posibles, a partir de:

 

-El redibujo de las obras según los temas de proyecto implícitos en las mismas.

-La construcción y proyecto, tanto de un problema (problematización), como de un contexto.

-La realización de unas ficciones epistemológico-proyectuales, mediante la reformulación y apropiación de los Temas de trabajo según los contextos planteados y unos Enunciados Proyectuales Preliminares en formato gráfico.

 

3.-Ficciones del Habitar

 Sentido: segundo práctico de acercamiento metodológico al tema según las consideraciones técnicas posibilitantes de las correspondientes a las prácticas individuales y sociales prefiguradas en el punto anterior.

Operatividad: Clases teórico-prácticas

Desarrollo: -Presentación y análisis de Dispositivos en Arquitectura de la vivienda.

-Redibujo de lo producido en el punto anterior según una estrategia de experimentación propuesta por el investigador proyectual en formación.

-Construcción de un Programa Complejo preliminar

-Ficciones epistemológicas propias: formulación de hipótesis y temas de trabajo desplegados en estrategias de abordaje propuestas por el investigador en formación.


4.-Ficciones Tectónicas Habitables.

 Sentido: Aproximación material a la investigación y la Tejne. Implementación de técnicas diversas de traducción entre imágenes, representaciones técnicas mediante dibujos y maquetas.

Operatividad: Clases teórico-prácticas

Desarrollo: En este punto, el investigador proyectual en formación deberá desarrollar la última instancia teniendo en cuenta:


-Una Experimentación Proyectual relativa a un material, su replicación y transformaciones sucesivas.

-Las determinaciones topológicas relativas a la experimentación. Desarrollo de una contextualización y temporalidades del proyecto, según unas precisiones de los aspectos tectónicos y su relación con las condiciones del habitar propuesto.

 

Bibliografía:

< Ábalos, I. (2000). La Buena Vida. Barcelona: Gustavo Gilli.

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< Banham, R. (1971). Teoría y diseño arquitectónico en la era de la máquina. Buenos Aires: Nueva Visión.

< Borja, J. y Castells, M. (1997). Local y global La gestión de las ciudades en la era de la información. Madrid: Grupo Santillana.

< Deleuze, G. y Guattari, F. (2002). Mil Mesetas Capitalismo y la esquizofrenia. Valencia: Pre-Textos.

< Derrida, J. (1988). El filósofo y los arquitectos, entrevista de H. Viale, Diagonal 73. pp 37-39.

< Derrida, J. y Eisenman, P. (1997). Chora L Works. New York: Monacelli Press.

< Echevarría, J. (1996). La vida doméstica en Telépolis, la ciudad global en: Presentes y futuros. Arquitectura en las ciudades. Barcelona: Actar.

< Eisenman, P. (1994). El fin de lo clásico, el fin del comienzo, el fin del fin”, DD. AA., Textos de arquitectura de la modernidad. Madrid: Nerea.

< Eliaschev, F. (2018). Dispositivos Proyectuales Sensibles. Buenos Aires: Editorial CONCETRA.

< Latour, B. (2008). Reensamblar lo Social: Una introducción a la teoría del actor-red. Buenos Aires: Editorial Manantial.

< Latour, B. (2017). Cara a cara con el Planeta. Buenos Aires: Siglo XXI.

< Morton, T. (2018). Hiperobjetos. Filosofía y ecología después del fin del mundo. Buenos Aires: Adriana Hidalgo editora.

< Morton, T. (2019). Ecología Oscura. Sobre la coexistencia futura. Madrid: Paidós.

< Sarquis, J. (2003). Itinerarios del Proyecto, tomos I y II. Buenos Aires: Nobuko.

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< Sarquis, J. (2005). La investigación proyectual, precisiones. Recuperado el 1 de agosto de 2013, de: http://www.arqepisteme.iteso.mx/CQV1JorgeSarquis1.htm.


 

      Interior II. Richard Hamilton

Autor: Dr. Arq. Leandro Tomás Costa 

Texto desarrollado para el Taller 1 (introductorio) de la Maestría de Investigación Proyectual de la FADU/UBA. Año 2022.